› Foros › FORO PRINCIPAL › Actividades › Noche 12 02 11 › Tema actual
Hola, soy Juan Morales.
Quiero expresar lo que me sugieren algunos comentarios de los amigos asistentes a la actividad de la noche del 12 de febrero de 2011 en la casa de Antonio del Toro.
Es cierto que fue una noche preciosa, para algunos incluso mágica.
Muchos de los participantes no habían mirado nunca por un telescopio. De pronto, empezaron a descubrir un mundo infinito que desconocían por completo y que hasta ese momento no tenía más significado que la de simple noche triste, oscura y vacía que antecede a otro día de quehaceres rutinarios.
Ayer fue muy distinto. De la mano de los amables expertos fueron guiados por los caminos de los espacios siderales de decenas y hasta miles de años-luz. Se sintieron abducidos por las personas de la agrupación que les abrían los ojos y les transportaban por los abismos con sus aparatos y con sus palabras. De esta manera y tranquilamente ninguna pregunta quedaba sin respuesta. Y se emocionaban por el esfuerzo de unas exposiciones fluidas y adaptadas a sus conocimientos.
Amigos, os puedo asegurar que más de una de esas personas giraron anoche algunos grados o por lo menos algunos minutos la brújula de sus miradas. Desde ahora el cielo existe. Ya podrán reconocer a Orión o a Júpiter y sus satélites. Han grabado en la memoria la ilusión de un impacto que ha ocasionado un cráter en la Luna. Las estrellas dobles, las nebulosas, nuestra vecina Andrómeda y hasta el dios romano Saturno, con sus ostentosos y solemnes anillos, fueron rescatados de los manuales literarios y gráficos en los que ellos no creían Pero si, allí estaban. Aquellos puntitos luminosos invisibles hasta ahora eran, por fantástico que parezca, mundos reales a los que viajaron a la velocidad de la luz.
Jugando con las Osas encontraron el Norte y se sintieron orientados.
Me comentan agradecidos con qué naturalidad, sencillez y confianza fueron tratados por los astrónomos. Resaltan sobretodo la figura del anfitrión.
Gracias a Antonio del Toro y gracias a todos, amigos.